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Filed Under (Asia, Camboya, Diarios de Bicicleta, Laos) by elmundoenbici on 26-02-2006

Camboya, Ruinas de Angkor Siguiendo el curso del Mekong, 15 de Febrero, 2006 (Camboya – Laos)

Una pareja de ciclistas nos dijo que no dejáramos de pedalear a lo largo del Mekong en las villas chiquitas por una ruta de tierra, y allí fuimos, la idea era seguir el curso del río hasta llegar a Laos, cruzar la frontera y continuar por allí. Así que el primero de febrero, inaugurando el nuevo año chino, que aquí es muy popular, salimos de Phnom Penh.La ruta al salir de la ciudad era terrible de congestionada, bien angosta y llena de camiones, camionetas, motos, carros todo vehículo donde se pudieran cargar montañas de personas, cocos, pastos, frutas, verduras, sacos de grano, la ruta no tiene ningún tipo de cartel, así es que preguntando a media lengua y con señas llegamos a cruzar un puente bien grande que cruzaba el río, y desde allí nos escapamos de la ruta y entramos en otro mundo… Read the rest of this entry »

Siguiendo el curso del Mekong, 15 de Febrero, 2006 (Camboya – Laos)

chris 264.jpg Una pareja de ciclistas nos dijo que no dejáramos de pedalear a lo largo del Mekong en las villas chiquitas por una ruta de tierra, y allí fuimos, la idea era seguir el curso del río hasta llegar a Laos, cruzar la frontera y continuar por allí. Así que el primero de febrero, inaugurando el nuevo año chino, que aquí es muy popular, salimos de Phnom Penh. La ruta al salir de la ciudad era terrible de congestionada, bien angosta y llena de camiones, camionetas, motos, carros todo vehículo donde se pudieran cargar montañas de personas, cocos, pastos, frutas, verduras, sacos de grano, la ruta no tiene ningún tipo de cartel, así es que preguntando a media lengua y con señas llegamos a cruzar un puente bien grande que cruzaba el río, y desde allí nos escapamos de la ruta y entramos en otro mundo…

Una callecita de tierra, con mucho polvo y arena con casitas de juncos sobre pilotes, casi sobre la ruta que de a tramos se hacia angosta para solo dejar pasar una bicicleta, nos recibió… y fue un remanso de paz, después de la ruta cacofónica y llena de gases que veníamos siguiendo.Las casitas, una al lado de otra, y bien sobre la calle, pero todas con árboles alrededor, muchos bañados, árboles de mangos y otros, un poco de sombra, que daban los árboles. Read the rest of this entry »